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Aunque China es líder mundial en la producción y uso de autos eléctricos, con su política de Estado en apoyo de ambos aspectos, enfrenta desafíos de infraestructura para satisfacer la demanda de estaciones de carga o electrolineras –que parecen estar rebasando el éxito de sus políticas de subvenciones y los sistemas de créditos dobles para fomentar la adopción de vehículos eléctricos—, asunto que debe atender para garantizar una transición sostenible hacia la movilidad eléctrica a largo plazo.

NAGOYA, JAPÓN (26/03/2023).-Bienvenidos a este episodio, en el que hablaremos sobre la creciente popularidad de la electrificación de vehículos en la industria automotriz y cómo, China está liderando el camino en este campo.

China ha implantado la promoción de vehículos eléctricos como una política estatal y está ofreciendo un fuerte apoyo financiero para fomentar su adopción. En este episodio, analizaremos la situación actual de la electrificación de vehículos en China, sus logros y los desafíos que enfrenta.

China tiene como objetivo vender el 40% de los vehículos eléctricos en el país para 2030, con el gobierno implementando políticas favorables para los vehículos de nueva energía, que incluyen vehículos eléctricos, híbridos enchufables y vehículos de celda de combustible.

En 2021, se vendieron más de 3.5 millones de vehículos de nueva energía en China, lo que representa una cuota de mercado del 13.4%. El objetivo del gobierno es aumentar aún más la proporción de vehículos de nueva energía y alcanzar una tasa del 50% en 2035, con más del 95% de los vehículos eléctricos.

Una política de promoción de vehículos eléctricos que ha sido muy efectiva es la política de subvenciones, que el gobierno ha estado ejecutando desde 2010. Los montos de las subvenciones, que varían según el modelo y el rendimiento del vehículo, en el inicio de la política llegaban a los 600,000 o 700,000 yenes por vehículo.

Las subvenciones se entregan a los fabricantes de automóviles en lugar de los compradores, lo que ayuda a reducir los precios de venta al público. Además de esta política, China ha implementado un sistema de créditos dobles para los fabricantes de vehículos, que evalúa su producción de autos de nueva energía y les da incentivos si cumplen ciertos objetivos.

Aunque estas políticas han sido efectivas en fomentar la adopción de vehículos eléctricos en China, todavía existen desafíos. Uno de los mayores retos es la falta de infraestructura de estaciones de carga o electrolineras, que ha llevado a la preocupación de que la demanda de vehículos eléctricos supere la capacidad de estaciones de carga.

También hay inquietudes sobre la calidad de los vehículos eléctricos producidos por algunos fabricantes chinos y la necesidad de mejorar la tecnología de baterías para aumentar el rango de conducción y reducir el costo.

Problemas de infraestructura en China: el lado oscuro de la promoción de vehículos eléctricos

La promoción de vehículos eléctricos en China ha sido un éxito en cuanto a la contribución a la difusión de nuevas energías. Sin embargo, el exceso de políticas promocionales ha llevado a la creación de una “burbuja” de vehículos eléctricos, lo que ha generado problemas en la sociedad.

El mayor problema desde la perspectiva del usuario es el de la falta de estaciones de carga.

La infraestructura de electrolineras debe ser expandida y actualmente esto no se está realizando en las zonas rurales. Las quejas de los consumidores son numerosas y los propios establecimientos de carga no tienen una tasa de uso suficiente para cubrir sus costos de mantenimiento. Este problema se hizo evidente durante las vacaciones del Día Nacional de China, cuando un conductor de vehículo eléctrico quedó varado debido a la falta de cargadores y la congestión del tráfico. La carga de vehículos eléctricos consume el doble del tiempo que una carga de combustibles convencionales y esto está generando una gran cantidad de congestión en las estaciones de carga. Es necesario tomar medidas inmediatas para solucionar estos problemas de infraestructura en China.

La expansión de la infraestructura de electrolineras es una tarea urgente. En las zonas rurales, donde la mayoría de la población no cuenta con un garaje privado, la instalación de cargadores públicos se hace esencial. En las zonas urbanas, es necesario ampliar la infraestructura de carga en lugares como estacionamientos y centros comerciales. Además, las estaciones de carga deben mejorar la calidad de sus servicios y reducir los tiempos de espera de los usuarios.

La escasez de estaciones de carga en China y cómo afecta la adopción de vehículos eléctricos en el país

Para solucionar este problema, muchos conductores chinos están optando por vehículos híbridos enchufables, que pueden funcionar con gasolina en caso de emergencia. Esto les da la tranquilidad de saber que pueden seguir conduciendo, incluso si no pueden encontrar una estación de carga.

No obstante, la transición hacia vehículos eléctricos sigue siendo crucial para reducir la dependencia del petróleo y la contaminación del aire en el país. A pesar de esto, la adopción de autos eléctricos en China ha disminuido debido al fin de las subvenciones gubernamentales y la falta de infraestructura de estaciones de carga.

En enero de este año, las ventas de vehículos eléctricos en China cayeron 48.3% en comparación con el mes anterior, lo que muestra el impacto negativo de la falta de incentivos y la infraestructura de carga insuficiente.

Aunque este problema no es exclusivo de China, sino que también se observa en otros países que están impulsando la transición a vehículos eléctricos, es importante encontrar soluciones para garantizar una adopción sostenible.

Es fundamental que se realicen inversiones en infraestructura de carga y que se establezcan incentivos adecuados para fomentar la adopción de vehículos eléctricos, en la cual es importante educar a los conductores sobre sus beneficios y cómo pueden reducir la huella de carbono.

En conclusión, la experiencia de China en la promoción de vehículos eléctricos ha sido una lección valiosa para otros países que buscan seguir su ejemplo. Si bien las políticas de subvenciones y los sistemas de créditos dobles pueden ser efectivos para fomentar la adopción de vehículos eléctricos, también es importante abordar los desafíos relacionados con la infraestructura de carga para garantizar una transición sostenible hacia la movilidad eléctrica  a largo plazo. Es importante tener en cuenta que la electrificación de vehículos no es una solución mágica y universal, sino que requiere una estrategia cuidadosa y una inversión continua en infraestructura y tecnología para hacerla viable. La experiencia de China demuestra que aunque la electrificación de vehículos presenta desafíos, también ofrece oportunidades para abordar los retos ambientales y de seguridad energética que enfrentamos en todo el mundo.

Publicado originalmente por: https://www.vanguardia-industrial.net/electromovilidad-china-se-auto-impone-reto-en-infraestructura/

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