Ante los desafíos económicos y sociales que enfrenta América Latina, como el bajo crecimiento económico y la necesidad de transformar sus sistemas productivos, la innovación tecnológica puede ser la base para construir sociedades y economías más resilientes e inclusivas, afirmó Taj Meadows, jefe de Asuntos Externos Internacionales de DiDi.
Durante un webinar sobre la cooperación Asia-Pacífico, el ejecutivo resaltó que aprovechar el potencial de las tecnologías digitales permitirá desbloquear nuevas oportunidades de dinamismo económico, pero ello requiere que todos los actores del ecosistema digital trabajen juntos y superen los miedos y las incertidumbres que genera ‘lo nuevo’.
“Los desafíos de hoy se sienten grandes y lo son. ¿Cómo podemos gestionar tecnologías que mucha gente no entiende, Inteligencia Artificial, vehículos autónomos? ¿Cómo podemos hacer que nuestras megaciudades en crecimiento funcionen mejor para todos? ¿Cómo podemos movernos mejor?
“¿Cómo podemos asegurarnos de tener ciudades habitables? ¿Cómo vamos a revertir nuestro impacto en el clima, manteniendo el planeta habitable para ocho, nueve o 10 mil millones de personas?”: las respuestas a esas preguntas no son sencillas, pero pueden encontrarse soluciones en la tecnología, explicó Taj Meadows.
Además de la innovación, el ejecutivo dijo que otro elemento necesario para promover la recuperación y crecimiento de los países es la colaboración, que significa buscar oportunidades compartidas que beneficien a todos, pues ningún sector, ninguna empresa ni un gobierno por sí solo podrá hacerlo.
Sergio Cabrera, embajador de Colombia en China, detalló cómo el país asiático y el sudamericano están cooperando para lograr mayores niveles de inversión y transferencia de conocimientos en áreas como la digitalización y “la creación de un ecosistema de innovación”.
Se busca que, agregó, este ecosistema de innovación “impacte los sectores de agricultura, transporte, finanzas, energía y agregación de valor a los recursos minero y energéticos disponibles”, así como en otros sectores productivos.
En opinión de Marco Llinás Vargas, director de la División de Producción, Productividad y Gestión de la Cepal, la innovación y la colaboración tienen que dar paso a un nuevo modelo de desarrollo que ayude a resolver los problemas estructurales de la región, como la pobreza y el desempleo.
“Una de las principales razones detrás de este bajo crecimiento es el bajo crecimiento de la productividad en la región, el cual ha permanecido estancado e incluso disminuido en algunos países durante las últimas décadas. Y esto debería ser motivo de preocupación”, señaló el especialista.
Lo que se debe hacer para impulsar la productividad en América Latina, de acuerdo con el experto, es diversificar las economías y dar un salto hacia nuevas actividades económicas a partir de nuevas políticas industriales.
Estas políticas, explicó, necesitan contemplar múltiples dimensiones, incluidas, entre otras, la ciencia, la tecnología y la innovación, la extensión tecnológica, la transformación digital, el espíritu empresarial, el abordaje de los desajustes de habilidades, financiamiento tanto en etapas tempranas como tardías, inversión, incluyendo inversión extranjera directa, infraestructuras específicas, agendas normativas y regulaciones específicas”.
Marco Llinás destacó que las nuevas políticas industriales propiciaron “una transformación productiva sostenible de nuestras economías”. En otras partes del mundo, como Estados Unidos o la Unión Europea, los gobiernos están implementando este tipo de políticas y destinan enormes cantidades de recursos para incentivar el crecimiento de los mercados.
Sin embargo, en América Latina estos incentivos todavía son limitados. Aún así, los especialistas coincidieron en que hay numerosas oportunidades de colaboración para cambiar el rumbo.
Publicado originalmente por: https://dplnews.com/innovacion-tecnologica-base-para-construir-economias-mas-resilientes-y-productivas/
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