La marca alcanzó en 2016 ventas anuales de 2,231 unidades, pero desde 2020 no ha superado las 1,000 unidades anuales, alimentando rumores de su posible salida del mercado mexicano.
Infiniti, la marca de lujo japonesa, ha enfrentado tiempos difíciles en México en los últimos años. Sus ventas se desplomaron y la planta en Aguascalientes, que comparte con Daimler, ha sido motivo de especulación. Sin embargo, Guillermo Degollado, el nuevo director general de Infiniti en México, asegura que la marca está decidida a recuperar su presencia en el país mediante el rediseño de sus modelos y la apertura de nuevos concesionarios.
Como una marca relativamente nueva en el mercado de lujo, comparada con otros competidores en el segmento premium, comenzó sus ventas oficialmente en Estados Unidos a finales de 1988. Su objetivo era competir con Acura, Audi, BMW, Lexus, Mercedes-Benz y Volvo, en respuesta al auge del segmento en ese mercado. Curiosamente, Infiniti debutó primero en el mercado estadounidense antes que en Japón.
Desde entonces, la empresa ha expandido sus operaciones globales hacia países como Panamá, República Dominicana, México, Medio Oriente, Corea del Sur, Taiwán, Rusia, China, Ucrania y Chile. En nuestro país, la marca hizo su debut en 2011 y alcanzó un volumen de ventas anuales de 2,231 unidades en 2016, un año que destacó como histórico en la industria automotriz por sus cifras de ventas. Sin embargo, en 2020, se desplomaron a 787 unidades –según datos de INEGI– y desde entonces la marca no ha logrado superar la barrera de las 1,000 unidades anuales, lo que alimentó los rumores sobre una posible salida del mercado mexicano.
Pero Degollado es enfático: “No nos vamos de México. Hicimos un plan de transformación en los años anteriores. Se trata de hacer toda la construcción de promesa de marca, de renovación del producto”.
El director general subraya que la compañía no busca competir por precio, sino a través de experiencias únicas a sus clientes. “Actualmente, estamos creciendo a dos dígitos. Entonces, la masa está ahí. Hemos mejorado nuestra escala, pero no nos interesa el volumen como objetivo, sino como la consecuencia de generar experiencias distintas en el cliente”, aclara. En 2023, Infiniti vendió apenas 988 unidades, y en el primer semestre del año van 571 unidades, según datos de INEGI.
Queremos ser una marca de lujo aspiracional para nuestros inversionistas, empleados y clientes. Cuando eso suceda vamos a estar contentos. Guillermo Degollado, director de Infiniti
Uno de los aspectos clave de lo que Degollado llama “una nueva etapa para Infiniti” es el lanzamiento de productos renovados, comenzando con el QX80, el modelo insignia de la marca y el primero en lucir el nuevo lenguaje de diseño. “Este modelo es un claro ejemplo del enfoque que Infiniti está adoptando: tecnología avanzada, un diseño innovador y una experiencia de lujo que se diferencia de otras marcas”, dice.
El crecimiento de la red de distribuidores es un aspecto fundamental de la estrategia de Infiniti. “Estamos expandiéndonos por primera vez. Actualmente contamos con 17 distribuidores y nuestro objetivo es seguir creciendo”, señala Degollado.
La marca está presente en las principales ciudades que concentran el 80% del mercado, incluyendo Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, Puebla, Mérida y Cancún. “Sin embargo, aún existen mercados con oportunidades de expansión, como Toluca (Estado de México) y Culiacán (Sinaloa)”, añade.
Además, Infiniti promueve la renovación de todas las instalaciones de sus distribuidores. Según el directivo, ya se ha renovado la mitad de los puntos de venta, con el objetivo de mejorar la experiencia del cliente mediante espacios de vanguardia.
Sobre la competencia, Degollado reconoce que el mercado ha cambiado, especialmente con la entrada de nuevas marcas y la reconfiguración de otras. “Volvo se está volviendo masivo. Lexus tiene productos también masivos”, comenta. Sin embargo, Infiniti pretende mantener su enfoque en un segmento de nicho, dirigido a clientes que valoran la calidad y la exclusividad. “Nuestro ticket promedio está subiendo. Entonces, somos una marca de nicho. Una marca para un segmento muy definido”, afirma.
Actualmente, Infiniti ofrece cuatro modelos en el país, todos SUV con motor a gasolina. No obstante, Degollado indicó que evalúan opciones de electrificación, aunque sin prisa. “La marca tiene claro que debe evolucionar y ofrecer los productos adecuados en cada mercado. En México, actualmente, la infraestructura es insuficiente y esto genera un alto nivel de estrés para el usuario. Nos estamos preparando para adaptarnos, pero por ahora, la mayoría del mercado sigue siendo de gasolina”, dice.
Respecto a la planta de Infiniti en Aguascalientes, que ha sido foco de rumores sobre una posible terminación del acuerdo con Daimler, el directivo menciona que el complejo atraviesa “una reducción de turnos” y “ajustes de personal”, pero aseguró que no anunciarán una separación ni cambios en la ubicación de la producción en este momento.
A pesar de las modificaciones operativas, la producción de modelos clave como el Infiniti QX50 y QX55 continuará en México, sin planes inmediatos de trasladar su manufactura a otros sitios.
Publicado originalmente por: https://expansion.mx/empresas/2024/08/27/infiniti-se-va-de-mexico-su-director-general-responde
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