El 82% de los inversionistas globales considera necesaria la inclusión de los factores ASG en la estrategia corporativa, según PwC.
Este 2025 se perfila como un año crucial para las industrias mexicanas en su camino hacia un modelo más sostenible y adaptado a las nuevas demandas globales. Sectores clave como la automotriz, la construcción, las telecomunicaciones y la energía se están alineando con los objetivos de sostenibilidad, buscando transformar sus procesos para generar menor impacto ambiental y cumplir con las crecientes exigencias de los consumidores e inversionistas.
En el sector automotriz, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) prevé que, para el próximo año, los fabricantes incrementarán la producción de componentes eléctricos. Esta apuesta tiene como objetivo un modelo de transporte más sostenible y digital, alineándose con la tendencia global hacia la movilidad eléctrica.
Por otro lado, la Comisión Nacional de Vivienda ha identificado a la industria de la construcción como uno de los sectores más desafiantes en términos de sostenibilidad, ya que representa aproximadamente el 50% de las emisiones en la región. Para mitigar su impacto, se están adoptando nuevas prácticas y tecnologías que permitirán reducir la huella ecológica de los proyectos inmobiliarios.
Adriana Pulido, CEO de ILUNKA y experta en sostenibilidad, destaca que este cambio hacia prácticas más responsables no es casual. “La adopción de estrategias con enfoque Ambiental, Social y de Gobernanza (ASG) responde al crecimiento de la demanda de productos más amigables con el ambiente, la creación de nuevos reglamentos y las exigencias de los inversionistas internacionales, quienes buscan empresas con altos estándares sostenibles”, afirma.
Las industrias no solo son responsables de una parte significativa del PIB nacional, sino que también desempeñan un papel fundamental en el desarrollo económico del país. Por ello, la incorporación de principios ASG será crucial para las empresas mexicanas. Esta transformación permitirá a las empresas acceder a nuevas herramientas y conocimientos para fortalecer la economía, ajustándose a los cambios en la producción, el consumo y el financiamiento, adaptándose a las nuevas demandas del mercado global.
Entre las principales tendencias que marcarán el rumbo de las industrias en los próximos años se encuentran:
1. Cadena de Valor Sostenible: Las cadenas de suministro, que generan dos tercios de la contaminación de las industrias, serán clave en la transición hacia modelos más sostenibles. Con la implementación de las Normas de Información de Sostenibilidad (NIS), las empresas, incluidas las PYMES, deberán reportar aspectos ASG y medir su impacto ambiental y social, mientras optimizan sus procesos para reducir su huella ecológica.
2. Atención a Clientes Evolutivos: Los consumidores mexicanos cada vez más valoran la sostenibilidad y la transparencia de las empresas. Según EY, el 50% de los compradores considera que el impacto ambiental es casi tan importante como el precio. Las empresas deberán adaptarse a estas demandas para mantenerse competitivas.
3. Ciberseguridad: La protección de datos industriales será clave para las empresas que busquen mejorar su enfoque ASG. Actualmente, más del 66% de las empresas en México no tienen programas de ciberseguridad, lo que podría generar riesgos económicos, de reputación y de confianza, fundamentales para los inversionistas.
4. Diversificación de Talento: En el ámbito social, las empresas deberán implementar prácticas inclusivas en términos de género y derechos humanos. Las empresas que no se adapten a estas nuevas exigencias podrían enfrentar dificultades para atraer talento especializado y joven, lo cual es un factor crucial para los inversionistas.
5. Net Zero como Meta: La transición energética será un factor central para las industrias mexicanas. Se espera que las empresas adopten tecnologías limpias y enfoques para reducir residuos y emisiones, a fin de cumplir con las regulaciones y avanzar hacia la meta de cero emisiones netas.
Adriana Pulido concluye: “La industria en México atraviesa un periodo de transición importante y, a partir de 2025, deberá adaptarse a las crecientes presiones sociales y regulatorias. El enfoque hacia un modelo ASG les ayudará a consolidar sus compañías como pilares fundamentales de desarrollo, que no solo fomentan el crecimiento económico, sino que también contribuyen al bienestar social y al cuidado del medio ambiente.”
Publicado originalmente por: https://www.eleconomista.com.mx/empresas/industria-mexicana-futuro-sostenible-20250113-741796.html
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