La industria automotriz mexicana se ha consolidado como un pilar estratégico de la economía y como una de las plataformas manufactureras más relevantes de Norteamérica.
Con una red de 36 plantas de ensamble de vehículos, motores y transmisiones pertenecientes a empresas asociadas a la AMIA, el país combina escala productiva, especialización y cercanía con los principales mercados de consumo.
De estas instalaciones, 19 corresponden a vehículos, 10 a motores y 7 a transmisiones, con una capacidad instalada superior a 5 millones de vehículos y más de 2.3 millones de transmisiones al año. La operación de este ecosistema depende de una fuerza laboral de más de 100 mil empleados especializados, cuya preparación técnica resulta determinante para sostener la competitividad global.
En el primer semestre de 2025, la industria alcanzó un máximo histórico: más de 2 millones de unidades producidas, con un crecimiento interanual de 0.5%. Este desempeño ratifica el papel de México como un jugador central en la integración productiva de la región del T-MEC.

Localización estratégica y concentración regional
La distribución de armadoras en México responde a criterios de logística, infraestructura y disponibilidad de talento. El Centro-Bajío-Occidente concentra la mayor parte de la producción, con estados como Guanajuato, San Luis Potosí, Aguascalientes y Querétaro, donde operan General Motors, Nissan, Mazda, Toyota, Honda y BMW.
El noreste, encabezado por Nuevo León y Coahuila, fortalece la conexión directa con el mercado estadounidense a través de armadoras como KIA, Stellantis y General Motors. En el noroeste, Ford en Sonora y Toyota en Baja California aportan capacidad productiva orientada principalmente a la exportación. Finalmente, el centro-sur mantiene su relevancia histórica con Puebla y Estado de México, donde operan Volkswagen, Audi, Ford y General Motors.
Esta distribución geográfica ha favorecido el desarrollo de clústeres automotrices robustos, donde convergen proveedores Tier 1 y Tier 2, centros de ingeniería y programas académicos especializados, lo que genera un ecosistema que integra manufactura, innovación y capital humano.
La presencia de las grandes automotrices en México refleja un equilibrio entre tradición y modernización. Volkswagen mantiene en Puebla la planta de vehículos más grande del país, con una capacidad anual de 498,000 unidades, mientras que en Silao, Guanajuato, concentra la producción de motores.
General Motors opera nueve complejos en cuatro estados —Coahuila, Guanajuato, Estado de México y San Luis Potosí— con una capacidad combinada superior a los 2 millones de unidades. Nissan, por su parte, lidera en Aguascalientes con tres plantas, además de su alianza estratégica con Daimler. Ford, con presencia en Sonora, Chihuahua, Guanajuato y Estado de México, suma más de 1.3 millones de unidades entre vehículos, motores y transmisiones.
La red se complementa con armadoras que han diversificado la presencia industrial: Honda en Guanajuato y Jalisco, Mazda en Guanajuato, KIA en Nuevo León, Toyota en Guanajuato y Baja California, BMW en San Luis Potosí, Audi en Puebla y Stellantis en Coahuila, lo que consolida un mapa industrial competitivo y diversificado.
Perspectivas hacia la electromovilidad
Más allá de su escala actual, la industria automotriz mexicana se encuentra en una fase de transición. Varias plantas ya incorporan líneas de producción flexibles para vehículos híbridos y eléctricos, lo que anticipa una nueva ola de inversiones orientadas a la electromovilidad. Este cambio abre oportunidades para atraer proyectos vinculados a baterías, autopartes de nueva generación y procesos de manufactura sustentable.
En este escenario, México combina capacidad productiva, experiencia exportadora, capital humano especializado y ubicación estratégica, lo que lo mantiene como destino prioritario para las armadoras globales en su estrategia de movilidad del futuro.
OEMs en México y su país de origen
Estados Unidos
General Motors
Plantas: Silao, Ramos Arizpe, San Luis Potosí y Toluca.
Producción: Chevrolet Silverado, Blazer, Equinox y versiones eléctricas.
Ford
Plantas: Hermosillo, Cuautitlán, Chihuahua y Silao.
Producción: Bronco Sport, Maverick y Mustang Mach-E.
Stellantis
Plantas: Saltillo y Toluca.
Producción: Camionetas Ram y modelos Jeep.
Japón
Nissan
Plantas: Aguascalientes y Morelos (esta última operará hasta 2026).
Producción: Versa, Sentra, Kicks y Frontier.
Toyota
Plantas: Tijuana y Guanajuato.
Producción: Tacoma (fabricación conjunta en ambas plantas).
Honda
Planta: Celaya, Guanajuato.
Producción: HR-V y Acura ADX.
Mazda
Planta: Salamanca, Guanajuato.
Producción: CX-30, Mazda 3 y otros modelos.
Alemania
Volkswagen
Planta: Puebla.
Producción: Jetta, Tiguan y Taos.
Audi
Planta: San José Chiapa, Puebla.
Producción: SUV Q5.
BMW
Planta: San Luis Potosí.
Producción: Serie 2, Serie 3 y M2.
Mercedes-Benz (Daimler)
Planta: Aguascalientes (COMPAS, en colaboración con Nissan).
Producción: SUV GLB.
Corea del Sur
Kia
Planta: Pesquería, Nuevo León.
Producción: K3, K4 y otros modelos.
Hyundai
Inversión conjunta: con Kia en Nuevo León.
Producción: Tucson.
China
JAC Motors
Operación: en colaboración con Giant Motors, en Hidalgo.
Producción: Varios modelos de combustión y eléctricos.
BYD, Great Wall Motors y Geely
Situación: Han anunciado planes de instalarse o expandirse en México.
Publicado originalmente por: https://mexicoindustry.com/noticia/oems-en-mexico-conoce-las-armadoras-automotrices-instaladas-y-su-pais-de-origen
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